El bacalao es uno de los pescados que más me gustan, ya sea fresco como en salazón. Además permite hacer muchísimas recetas y experimentar con él.
En esta ocasión os traigo una receta muy apropiada para estos calores que estamos teniendo y que nos sirve como un completo plato único. Tengo que decir que al chiquitín de la casa le encantó y que se puso las botas jeje. Esta fue su mini ración
Os dejo con la receta y espero que os guste.
Ingredientes:
Patata
Bacalao en salazón desmigado
Tomate
Huevo duro
Pimiento rojo asado
Cebolla dulce Fuentes de Ebro
Aceite de oliva Virgen Extra
Sal
Elaboración:
24 horas antes de realizar la receta, desalar el bacalao. Para ello primero hay que poner el bacalao bajo el grifo y retirar el exceso de sal. Después hay que ponerlo a remojo en agua fría dentro del frigorífico. Pasadas 12 horas tirar el agua y volver a llenar el recipiente con agua fría y de nuevo a la nevera durante 12 horas más. Escurrir bien y retirar el exceso de agua con papel de cocina. Si se prefiere, se puede comprar el bacalao ya desalado.
Cocer en abundante agua las patatas y los huevos. Pelar y cortar a rodajas de 1/2 cm de grosos aproximadamente. Cortar también el tomate. La cebolla la cortaremos en juliana fina. Reservar.
Los pimientos rojos los podemos asar nosotros mismos pero si se quiere ahorrar tiempo, venden unas tarrinas de pimientos asados a tiras la mar de apañadas.
En un plato, disponer una capa de patatas. Sobre estas disponer el huevo duro y después el tomate. Añadir el pimiento y la cebolla. Sazonar.
Encima de todo disponer el bacalao bien desmigado y regar con abundante aceite de oliva virgen extra.
Reservar en la nevera hasta el momento de comer.
¡Qué ricas son las ensaladas con bacalao!, creo que es un pescado camaleónico…se adapta a cientos de platos.
Besos guapa
Marialuisa